Ahí donde habita el olvido suele colarse el recuerdo
y qué mala suerte che que el dolor lo saca corriendo,
él no se da por vencido, vuelve emperrado,
el olvido ni se pispea ya que anda, como siempre, algo borracho.
Ahí donde habita el recuerdo suele colarse el olvido
borracho el loco suele robarle algunos momentos del alhajero,
éste lo encuentra y antes que cuente diez el olvido se escapa.
¿A dónde va el olvido si con el recuerdo no se lleva y el dolor lo acompaña?
Así andan estos dos locos por los montes de la mente
y entre dolores y alegrías danza y baila la vida.
Cuando el tiempo sufre un paro cardíaco o el reloj se queda sin pilas
el recuerdo se marcha a descansar y el olvido de lo demás se olvida.
Así andan estos dos, y cuando el ocaso se yerme sobre el respirar
entre tambores indios y aplausos de flamenco
danza alegre y penosa la muerte
que flaca como la ven se olvida de quien nace y se acuerda de quien muere.
Kenny
El olvido y el dolor son sentimientos que mayormente van unidos. Sin dolor no logras olvidar los recuerdos de esa persona y con dolor tal vez los olvides, pero con el tiempo los recuerdos positivos de esa persona traerán un recuerdo hermoso. Por eso: "Así andan estos dos locos por los montes de la mente y entre dolores y alegrías danza y baila la vida". ¡Muy bonito che! Me encanta la fusión tan verdadera. Creo que esta fusión es un gran defecto y a la vez una gran virtud del ser humano…
ResponderEliminarmajo:)